La historia del perseguidor favorito de toda la serie de Resident Evil es más compleja y extensa de lo que parece.
Finalmente entramos en lo que parece ser la recta final rumbo a Resident Evil Village. Por esa razón es conveniente continuar con nuestra querida sección llamada Road to the Village, donde recapitulamos ciertos elementos que consideramos clave para la octava entrega numérica de la franquicia de survival horror.
Durante las ultimas entregas de nuestro Road les hemos traído elementos muy interesantes vistos a través de los diferentes títulos de la franquicia, y hoy toca el momento de entrelazar algunos hilos y hablar de una criatura que bien puede considerarse la más icónica de toda la serie, y me refiero a nuestro perseguidor favorito llamado Nemesis.
Pero antes de empezar, les hago la invitación para ir a leer nuestros artículos anteriores con el fin de no pasar ningún detalle por alto, en especial dos de ellos. El primero de ellos es aquel en el que hablamos sobre el T-103, primer Tyrant en ser producido en masa. El segundo artículo que deben leer antes de empezar es el que trata sobre el parásito NE-α, el más importante en esta ocasión.
¿Listos? Es momento de empezar.
La creación del cazador perfecto
Como recordarán, un grave problema del parásito NE-α era la dificultad para encontrar un huésped apropiado. Para fortuna de la rama europea de Umbrella, el avance en el desarrollo del proyecto Tyrant les fue de gran utilidad. La producción en masa del modelo T-103 proporcionó una gran oportunidad a la hora de conseguir sujetos de prueba para el uso del NE-α, pero eso no era todo.
Los avances conseguidos en mejorar la inteligencia de los modelos T-103 y su capacidad de seguir ordenes específicas fue bien aprovechado por los encargados del Proyecto Nemesis.
La unión de la inteligencia de un T-103 con el desarrollo cerebral proporcionado por el NE-α dio origen a un nuevo tipo de soldado capaz de llevar a cabo misiones complejas que ningún otro producto de Umbrella pudiera igualar, incluso usando el juicio propio. Un cazador capaz de usar correctamente armas que requieren conocimientos especiales. Todo había cambiado, el Nemesis-T Type había nacido.
Como recordarán, un traje y un dispositivo especial fueron añadidos al monstruo para limitar el crecimiento celular y regular ciertas características resultantes de la fusión del parásito NE-α con el T-virus.
Raccoon City, el campo de pruebas perfecto
Meses después del incidente de la mansión Spencer, Raccoon City sufrió un desastre biológico causado por el T-Virus. Umbrella tomó ventaja de esto y desplegó gran cantidad de sus productos biológicos para probar sus habilidades en combate, incluidos diversos ejemplares de Tyrant T-103 que fueron asignados a misiones especificas, tal como recuperar muestras virales y otras más. Pero todavía quedaba una cuenta pendiente para Umbrella.
Desde los eventos de la mansión y la traición de Albert Wesker, los miembros restantes de S.T.A.R.S. mantuvieron sus investigaciones sobre Umbrella, lo cual significó un gran problema para la compañía, a pesar de sus sobornos a Brian Irons, el jefe de policía local. Eliminar estos inconvenientes era una prioridad.
Para poder realizar dicha tarea, Umbrella Europa preparó el primer prototipo funcional de Nemesis-T para ser desplegado en Raccoon City con el objetivo de encontrar y eliminar a los miembros de S.T.A.R.S. Es aquí donde el nombre Nemesis reafirma su significado, al recibir la tarea de vengar al T-002 destruido en la mansión Spencer.
Si el Nemesis cumplía su misión con éxito, la división europea de Umbrella ganaría la batalla con su contraparte americana, al demostrar que su proyecto estrella era superior.
Escuela para Tyrants
Posiblemente aquí es donde se pregunten, ¿cómo es que Nemesis podía identificar a sus objetivos?
La respuesta es más sencilla de lo que parece. Los científicos del Sexto Laboratorio de Europa “educaron” a Nemesis mediante fotografías y otros materiales visuales de los miembros de S.T.A.R.S. La inteligencia desarrollada por el Tyrant le permitió comprender las instrucciones recibidas, por lo que se enfocaría en sus objetivos.
Finalmente, el prototipo recibió el nombre clave “The Pursuer” y fue llevado a Raccoon City mediante un helicóptero, de manera similar a las otras armas biológicas desplegadas en la ciudad.
El inicio de la cacería
Tanto en la historia vista en el RE3 de 1999 como en su versión de 2020, dos miembros de S.T.A.R.S. se mantenían en la ciudad al momento del desastre, Brad Vickers y Jill Valentine. Ambos se convirtieron en los objetivos primarios de The Pursuer.
Una de las bondades que el RE3 de 2020 nos dio fue conocer un poco más sobre la llegada de Nemesis a Raccoon, de la mano de un informe escrito por Nikolai Zinoviev. Nemesis fue desplegado a las 18 horas del 28 de septiembre, iniciando su misión.
Tanto en la versión de 1999 como en la de 2020 el perseguidor tuvo encuentros con Brad y Jill, con Brad advirtiendo sobre el peligro a su compañera en ambas ocasiones. En el juego original tiene una de las presentaciones más icónicas dentro de la franquicia, al aparecer en la entrada del R.P.D. para asesinar a Brad justo frente a Jill, mostrando además los tentáculos que podía usar como armas letales.
En el remake se omite dicha escena, cambiando la brutal presentación con el fin de mostrarlo como un perseguidor letal al atacar a Jill directamente en su departamento. Al final de ambas versiones, la oficial Valentine consigue escapar por muy poco de la amenaza de Nemesis, solo para enfrentarlo más adelante en diferentes ocasiones.
Amigo o enemigo, esa es la cuestión
Antes de avanzar más me gustaría explicar un tema que posiblemente los tenga confundidos. Ya que anteriormente les mencioné que Nemesis fue “educado” para conocer sus objetivos, supongo se preguntarán por qué ataca a miembros de Umbrella como Carlos, Mikhail e inclusive Nikolai. Bueno, la respuesta es sencilla.
En palabras de Yasuhisa Kawamura, escritor del RE3 original, Nemesis reconoce como aliados de Jill a todos aquellos a los que vio interactuando con la oficial, razón por la que fueron ubicados como potenciales objetivos. De ahí el motivo para que el monstruo asesine a Nikolai en uno de los finales del juego de 1999. En cuanto a Carlos y Mikhail, Nemesis solo los atacó en respuesta a sus agresiones previas.
La misión ante todo
En todas las entregas que recrean el último escape de Jill, la ex-S.T.A.R.S. siempre se las arregló para escapar de la amenaza de Nemesis, utilizando todo lo que estuviera a su alcance para detener al monstruo. Desafortunadamente para ella, la determinación de Nemesis lo hacía levantarse cada que caía al suelo.
La resistencia al daño y la capacidad de regeneración que el T-virus y el parásito NE-α le otorgaron al Nemesis le permitían soportar todo lo que Jill le hiciera, sin importar si era golpeado por un lanzacohetes o las explosiones de un tanque de combustible y un explosivo.
Pero la amenaza de Nemesis no radicaba únicamente en su gran tamaño y su imparable insistencia, ya que su inteligencia le permitía hacer uso de armas diseñadas especialmente para él, cosa que lo diferenciaba en gran medida del T-00, el otro gran acosador de Raccoon City.
La mayoría recordará a Nemesis portando un inmenso lanzacohetes con el que podía hacer gran daño a Jill, pero a lo largo de sus diferentes versiones lo hemos visto usar un pequeño pero peligroso arsenal. En Operation Raccoon City el monstruo fue capaz de usar una gatling, arma que estuvo a punto de ser incluida en el remake de 2020, pero finalmente fue sustituida por un inmenso lanzallamas usado en una de las secuencias mas claustrofóbicas del juego.
El riesgo biológico de Nemesis
Si todo esto que les comenté anteriormente les parece aterrador, no es todo lo que Nemesis puede hacer. Por el lado biológico fueron añadidas dos interesantes habilidades que aumentan la peligrosidad del perseguidor. La primera es la capacidad de infectar, o mas bien, parasitar otros organismos mediante sus tentáculos. Los seres infectados recibirán habilidades similares a las vistas en Las Plagas, ya que como recordaremos, el NE-α es una versión artificial del parásito visto en RE4.
Por el lado del T-virus, Nemesis adquirió la habilidad de infectar a sus presas con dicho virus, una habilidad similar a la de algunos depredadores del reino animal. Esta habilidad en especial fue un gran problema para Jill Valentine, ya que después de la batalla cerca de la torre de St. Michael fue infectada por un Nemesis moribundo, que la hizo caer en un estado de gravedad. Si el mercenario Carlos Oliveira no hubiera puesto en peligro su vida para conseguir el antídoto, es posible que Jill hubiera muerto.
Bard tenía razón, los parásitos son peligrosos
El Nemesis desplegado en Raccoon City era un cazador formidable, pero ni con todo eso podía terminar su misión. Finalmente, el daño causado por Jill Valentine tendría graves afectaciones en la anatomía del perseguidor. Y aun así, Nemesis seguía de caza.
El monstruo pasó por diversas transformaciones en su cuerpo donde se veían cada vez más las características del NE-α, principalmente en lo que a tentáculos se refiere. Una vez más, esto no fue suficiente. El instinto y el hambre eran más fuertes.
Después de un grave daño sufrido por un baño de ácido (en 1999 y 2020), Nemesis perdió el control. Con su limitador y los restos del cuerpo del T-103 destruidos, el parásito tomó el control y sus instintos más básicos y feroces salieron a flote. Consumiendo los restos de otras armas biológicas; lo que alguna vez fue el arma más avanzada de Umbrella se convirtió en una masa gigante de tentáculos y ácido, impulsada por la necesidad de alimentarse y tal vez, solo tal vez, un vago recuerdo de su objetivo principal, la última S.T.A.R.S. en Raccoon City.
El último cazador de Raccoon City no iba a descansar hasta alcanzar a su presa.
La buena suerte de Jill
El final de Nemesis tenía que llegar en un momento, y ante el mejor cazador se necesitaba la mejor arma disponible.
Para lograr derrotar al monstruo, Jill tuvo que usar la llamada “Paracelsus’ Sword“. Dicha arma fue llevada por el ejército de los Estados Unidos para combatir criaturas G en su intento por obtener una muestra del G-virus. Desafortunadamente, los militares no pudieron usar el arma en la emboscada sufrida por un grupo de T-103. A diferencia de ellos, Jill sí pudo activarla y la usó para dar un fin definitivo a la cacería de Nemesis.
En la versión de 2020, Jill necesitó del “Ferromagnetic Infantry-use Next Generation Railgun“, o conocido simplemente como “FINGeR“. Dicha arma fue desarrollada en cooperación con el ejército y su objetivo era precisamente la supresión de armas biológicas en caso de riesgo, siendo capaz incluso de eliminar Tyrants. El arma ideal para Nemesis.
Finalmente, Nemesis había caído.
Una gran lección para Umbrella
Tal vez la frase será repetitiva, pero Raccoon City fue el campo de pruebas perfecto para Umbrella, algo que cambió para siempre a la compañía y, principalmente, la carrera biológica.
La implementación del parásito NE-α y el despliegue del prototipo de Nemesis-T Type dio una gran retroalimentación sobre el camino a seguir en la creación del soldado perfecto. Los parásitos no eran opción, por lo que tenían que buscar otros caminos. Umbrella aprendió de sus errores y cambió el control biológico por el control artificial.
Años después de los eventos de Raccoon City y el fracaso del Nemesis, Umbrella diseñó un Tyrant similar controlado por Red Queen, la super computadora de Umbrella. Dicha creación recibió el nombre clave de T-A.L.O.S. y posiblemente hablemos de él más adelante.
Nemesis significó una de las jugadas mas arriesgadas de Umbrella en la carrera biológica, por lo que quisieron llevar la apuesta hasta su límite. Afortunadamente para ellos, el desastre en Raccoon les permitió poner a prueba su máxima creación hasta el momento. Y tal como algunos investigadores lo habían externado, el poco ortodoxo uso de parásitos terminó saliéndose de control y el proyecto se derrumbó.
Las esperanzas puestas en el Proyecto Nemesis quedaron sepultadas bajo las cenizas de Raccoon City
Con el cierre de nuestro artículo actual damos por concluido un mini arco de nuestro Road en el que hablamos de las grandes glorias que Umbrella llegó a tener, por lo que en nuestra siguiente entrega será momento de hablar sobre la caída del imperio de la compañía. Una historia de traiciones y lucha de egos está por acabar. Una de mis historias favoritas.
Por esta y otras razones los invito a estar atentos a nuestro Road to the Village, que conforme pasan las semanas nos encontramos más cerca de por fin poder disfrutar la octava entrega de nuestra querida franquicia, inclusive tal vez la próxima semana que nos leamos ya contemos con una fecha de estreno oficial.