La historia de Umbrella se compone de traiciones, y hoy vas a conocer aquella que lo cambió todo.
El tiempo pasa y con ello nuestro Road to the Village, dentro del cual nos estamos acercando cada vez más a los eventos que hemos podido disfrutar dentro de los videojuegos de Resident Evil; pero paciencia, que queremos que todo quede totalmente claro antes de avanzar.
El tema que trataremos a continuación tiene gran relevancia dentro de la historia que nos presentan los primeros videojuegos, o al menos los que ocurren en los bosques de Arklay, así que te recomiendo que antes de empezar vayas y leas las anteriores entregas de esta serie de artículos: el origen del virus Progenitor, debido a que los personajes involucrados tendrán gran relevancia; la fundación de Umbrella, dada su relación con el primer tema, y finalmente, nuestra explicación sobre el Proyecto Wesker, ya que hablaremos mucho sobre uno de los participantes en dicha investigación.
Si ya te encuentras al día, es momento de empezar con esta historia llena de traiciones y lucha de egos.
La misteriosa muerte de Edward Ashford
Si nos han acompañado desde el inicio, recordarán que la Corporación Umbrella fue fundada para servir de tapadera a la investigación sobre el virus Progenitor. La imagen pública de farmacéutica multinacional ayudó a conseguir fondos que permitieron continuar con las diversas investigaciones que la organización realizaba y el posterior desarrollo de armas biológicas para su venta. Las principales cabezas de la compañía eran Ozwell Spencer, James Marcus y Edward Ashford, cada uno con motivos diferentes, unidos gracias al virus Progenitor.
Durante una de sus tantas investigaciones, Edward Ashford murió después de infectarse con una muestra del virus Progenitor, lo que significó grandes cambios dentro de Umbrella y la familia Ashford. Pero como ya es conocido, las cosas con Umbrella siempre son más complicadas de lo que parecen.
A pesar de que la muerte de Edward fue considerada accidental, existen sospechas que indican que Ozwell Spencer estuvo detrás de ella, rumor alimentado por la costumbre de Spencer en lograr sus objetivos sin importar a quien debe quitar del camino, tal como hizo con los Ndipaya antes de establecer las instalaciones de Umbrella en África. Poco tiempo después de que Umbrella fue fundada, solo dos de sus miembros fundadores quedaban con vida.
Sospechas y planes de Marcus
Una vez que logró descubrir y manipular el virus Progenitor, las energías de James Marcus se volcaron totalmente a su trabajo, sin importarle las decisiones que las personas a su alrededor tomaran, siempre y cuando no afectarán su investigación, como fue cuando Spencer propuso fundar una compañía.
En cuanto Umbrella empezó sus operaciones, Spencer continuó la expansión de la compañía al crear un Centro de Formación, ubicado en las montañas Arklay a las afueras de Raccoon City. Para dirigir las instalaciones Spencer ofreció directamente el puesto a Marcus, cosa que este aceptó al ver la infraestructura con la que contaba el lugar, totalmente apto para su investigación. Estas acciones hicieron que Marcus notara un cambio en la actitud de Spencer, pero juró que su compañero no se interpondría en su camino.
Después de varias investigaciones sobre el virus Progenitor, Marcus encontró la forma de dar el siguiente paso, por lo que puso su objetivo en el desarrollo del Virus T, haciendo uso de ADN de sanguijuela. Su trabajo pronto lo llevó a hacer experimentos en mamíferos, los cuales se intensificaron conforme su progreso avanzaba.
Durante este tiempo, las alarmas de Marcus se activaron al notar que alguien sospechaba sobre sus experimentos, pero finalmente culpó a su imaginación. Finalmente todo tuvo su recompensa cuando Marcus desarrolló la primera cepa estable del nuevo virus T, el 13 de enero de 1978. Esto era lo que él mismo necesitaba para finalmente mover sus piezas en contra de Spencer.
Pero Marcus no era el único que tenía sus planes ocultos.
Su laboratorio fue invadido al menos un par de veces en los días posteriores, y debido a que las principales pruebas se encontraban en los dispositivos que configuró para protegerlo, Marcus entendió que iban en busca del virus T, y todo parecía apuntar a una persona; sí, adivinaron, el mismo Spencer.
Para tratar de ganar ventaja a su nuevo enemigo, Marcus decidió presentar su nuevo descubrimiento en la próxima reunión con los directores de la compañía. Con el objetivo de mantener alejados a los merodeadores, él confió dicha tarea a Albert Wesker y William Birkin, dos jóvenes investigadores que creía leales. Grave error.
Wesker y Birkin
Pero, ¿quiénes son estos dos investigadores en los que Marcus confiaba tanto?
Ya conocemos el origen de Albert Wesker, pero hoy es momento de explorar su trabajo en Umbrella y su relación con William Birkin. Como ya hemos mencionado antes, Spencer fundó el Centro de Formación cerca de la Mansión Spencer en 1968 a la par de la creación de Umbrella dejando como encargado a Marcus. Este ultimo tomó provecho para continuar con sus investigaciones, cosa que lo mantuvo separado de la responsabilidad de los diferentes aprendices.
Todo cambió en 1977 con la llegada de dos jóvenes llamados Albert Wesker y William Birkin, quienes desarrollaron una especie de rivalidad amistosa durante su preparación y apoyo en la investigación sobre el virus Progenitor, cosa que llamó la atención de Marcus, quien por primera vez en mucho tiempo había puesto sus ojos en algo más que su propio trabajo.
Tan solo un año después, exactamente el 29 de julio de 1978, Spencer ordenó el cierre del Centro de Formación, evento que tuvo dos consecuencias inmediatas. Primero, dado el gran desempeño mostrado por Wesker y Birkin, tan solo dos días después ambos fueron transferidos formalmente a las investigaciones sobre el recién descubierto virus T en las instalaciones de Arklay. mientras que James Marcus continuó su propio trabajo en el Centro de Formación.
Por órdenes de Spencer, Wesker y Birkin fueron asignados como dejes de investigaciones, razón por la que fueron rápidamente integrados a los diferentes trabajos realizados en el lugar; una de las primeras peticiones de Birkin fue conseguir una muestra del virus Ébola, sobre el cual se encontraba muy interesado y que Umbrella consiguió con la supuesta intención de desarrollar una vacuna.
Durante su primer día en el lugar conocieron a Lisa Trevor, quien era utilizada como sujeto de prueba de los virus Progenitor y T por los investigadores, y según palabras del mismo Albert, ese día Lisa cambió algo en las mentes de él y Birkin.
Casi tres años después, el 27 de julio de 1981, Umbrella asignó a la joven Alexia Ashford –de tan solo diez años– como líder de investigación en las instalaciones de la Antártida, cosa que causó revuelo en toda la compañía al considerar a Alexia como la gran sucesora de su abuelo Edward. Pero obviamente, esto no fue bien visto por Albert y William, especialmente por este último, ya que Alexia le robó el título del investigador más joven.
Durante sus investigaciones, Wesker y Birkin lograron grandes avances en el campo de las armas biológicas, especialmente sobre los llamados zombis y los que posteriormente serías conocidos como Hunters. Estas investigaciones tomaron toda la atención de Birkin, cosa que llevó al uso de gran cantidad de conejillos de indias, hasta que puso sus ojos sobre Lisa Trevor y su capacidad de soportar todas las pruebas a las que había sido sometida.
El 31 de diciembre de 1983 todo cambió dentro de Umbrella, ya que desde la Antártida llegaban informes de la muerte de Alexia Ashford, quien después de la muerte de su padre era considerada la última gran prodigio de la familia, a pesar de la existencia de su hermano gemelo. Los rumores indicaban que Alexia había muerto tras inyectarse una muestra del virus T-Veronica, el trabajo de su vida. Esa noticia alegró a Birkin, porque su rivalidad lo hacía despreciar todo lo relacionado a Alexia, llegando incluso a negarse a la sugerencia de Wesker de obtener una muestra del virus desarrollado por ella misma.
Corría el año de 1983 cuando Wesker empezó a realizar investigaciones sobre la exposición al virus T, gracias a lo cual pudo conocer el verdadero potencial del mismo, y eso lo llevó a cuestionarse los motivos de Spencer para colocar un centro de investigación en las montañas Arklay, debido a la cantidad de formas de vida dentro del bosque que podrían resultar afectadas por una posible fuga viral. Con la intención de obtener más información, Wesker tomaría la decisión de renunciar a sus labores de investigador, pero incluso él sabía que debía mantener sus planes ocultos de Spencer.
Para no levantar sospechas, Wesker siguió colaborando en más investigaciones junto a Birkin, cosa que llevó a ambos a ganarse la total confianza tanto de Spencer como de Marcus.
La traición
En algún momento entre enero y julio de 1988, Spencer le mostró a Marcus que nadie es mejor que él en el juego de las traiciones. Consciente de todo lo que James tenía en mente, Spencer envió a un equipo del Servicio de Seguridad de Umbrella (conocido como U.S.S.) y del que ya hablamos en artículos previos, a irrumpir en el laboratorio de Marcus y asesinarlo.
En el momento en que el equipo especial ingresó en su laboratorio, Marcus se encontraba realizando algunas pruebas del virus T en sus sanguijuelas, por lo que los sucesos lo tomaron por total sorpresa. Ante los disparos cayó al suelo junto a algunos de sus sujetos de prueba, pero no murió inmediatamente. El evento tomó un giro personal cuando Marcus observó a Albert Wesker y William Birkin, aquellos dos jóvenes en los que tanto confiaba, ingresar al laboratorio junto al resto del equipo de asalto.
La misión de los dos investigadores era, por ordenes de Spencer, recuperar toda la información referente a las investigaciones reportadas y ocultas de Marcus sobre el virus T, por el cual Birkin tomó todos los créditos, incluso siendo nombrado como el creador del mismo. Debido a esto, Wesker y Birkin continuaron con las investigaciones sobre el virus T al grado de llevarlo al siguiente nivel, el denominado Proyecto Tyrant.
El legado de Marcus, destruido
Una vez que los datos de sus investigaciones fueron puestos bajo protección, James Marcus fue borrado casi en su totalidad de la historia de Umbrella, manteniendo su participación en el desarrollo del virus Progenitor y su función como jefe del Centro de Formación, mientras que su destino en la compañía fue manejado como un despido a causa un abuso de poder, liberando a Spencer, Birkin y Wesker de toda responsabilidad.
Dos de las cabezas de Umbrella habían sido cortadas por la más inteligente de las tres, demostrando que Edward Ashford y James Marcus solo eran peones en el juego principal de Spencer, a quien nadie iba a detener en sus deseos.
Mientras tanto, el cuerpo inerte de Marcus y algunos de sus conejillos de indias fueron colocados en el sistema de desechos, donde se esperaba que el tiempo se encargara de él de forma natural, pero algunas cosas no salieron como se esperaban. Una de sus queridas sanguijuelas, la reina, nadó hasta donde se encontraba su cuerpo y se introdujo en su interior, empezando un proceso del cual hablaremos otro día.
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A pesar de que la traición de Umbrella a Marcus puede parecer un hecho simple, hemos visto que dicho evento tiene mucha historia qué contar; el camino de Wesker y Birkin, la traición en sí y las consecuencias que esta tendrá para cada uno de los involucrados, porque como dice el dicho “lo que mal empieza, mal acaba”, y eso también aplica para Umbrella.
Espero hayan leído con atención cada detalle de lo que tratamos en este artículo, ya que las siguientes entregas de nuestro Road estarán ligadas directamente a ellos, explorando y adentrándonos más a fondo en algunos de los grandes eventos de Resident Evil, rumbo a Village. Si quieren vivir lo que les contamos en este capítulo directamente en los juegos, prueben jugando Resident Evil Zero.
Por cierto, en caso de que se hayan perdido alguna entrega de nuestro Road to the Village, pueden leer todos los artículos existentes hasta el momento en este enlace. Además, recuerden seguir a That Arklay Place en Facebook y Twitter para estar enterados de cada novedad.
