Dino Crisis y la conclusión que todos esperamos vivir

El retorno del hermano desaparecido de Resident Evil es una de las peticiones más frecuentes del fandom. ¿Algún día se volverá realidad?

Indudablemente, nuestra generación está pasando por un momento interesante en términos de nostalgia. Las compañías con las que hemos crecido han encontrado una mina dorada en pronunciar nuevamente el nombre de franquicias olvidadas en eventos y las han rejuvenecido con entregas frescas que se adaptan al lenguaje moderno.

Esto, en conjunto con grandes ejemplos de remakes y remasterizaciones, nos ha mantenido formando parte de comunidades, comprándolo todo sin titubear; pero también ha sido un recurso interesante para que los jugadores más jóvenes formen parte de dichas comunidades sin la necesidad de adquirir sistemas de generaciones pasadas.

Estamos a escasos días de recibir con los brazos abiertos a la nueva generación de consolas y eso da pie a que todo continúe así.

Sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas y no todo lo que deseamos se ha cumplido tan rápido; todavía hay varias propiedades intelectuales que a pesar de tener grupos gigantes de fans vocales y fórmulas que podrían funcionar hoy, simplemente parecen no formar parte de lo que volverá pronto.

Dino Crisis es una de ellas. Este título debutó a finales de los noventa, cuando el survival horror daba los primeros pasos hacia su momento más rico y diverso. La primera y segunda entrega fueron bien aceptadas entre el nicho; pero ésto fue insuficiente para que la propiedad se convirtiera en una de las más lucrativas de Capcom, marcando su final, hasta el momento, luego de tres entregas principales y un spin-off.

Resident Evil’s perfect sibling

No es un secreto que del éxito que abraza, abrazó y probablemente seguirá abrazando a Resident Evil surgen muchos proyectos que ahora conocemos con otros nombres dentro de la alineación de Capcom. Ejemplos ya hay varios: Onimusha, Devil May Cry y hasta cierto punto elementos de las fórmulas de Clock Tower 3 y Haunting Ground.

El título más identificable entre todos estos proyectos, es Dino Crisis, cuya primera es identificada por muchos como “el Resident de dinosaurios” con justa razón. A decir verdad había extremas coincidencias entre ambos, nada de ello siendo accidental ya que ambos son obra del equipo del maestro Shinji Mikami y el deseo por seguir lucrando con lo que ya he denominado varias veces como “la fórmula ganadora”.

De hecho, recientemente fue publicada una entrevista en la que Mikami habla sobre su trayectoria de más de 30 años. Él mismo analiza cómo fueron sus inicios en Capcom, cómo fue el desarrollo de Resident Evil y cómo Dino Crisis fue la búsqueda de llevar esas ideas a un ambiente distinto y un poco más orientado a la acción, trayendo consigo una aventura que nos dio una nueva perspectiva del survival horror en 1999.

También compartió un poco del origen de Dino Crisis que en realidad es una especie de “accidente feliz”. Fue la concepción de un equipo que se dedicaba principalmente a pensar en nuevas ideas; Mikami cuenta que la mayoría se marchó de la compañía súbitamente, quedando apenas un grupo pequeño que se acercó a él para preguntarle qué harían ahora.

Para resolver el problema, Mikami accedió a dejarlos formar parte de su equipo y así comenzaron a confeccionar ideas, pero nada parecía sonar atractivo. Luego de un tiempo, Mikami pidió que comenzaran a pensar en conceptos de forma individual y así fue como a un pupilo se le ocurrió un juego que trajera dinosaurios consigo, ya que en aquel entonces estas criaturas todavía eran un símbolo en la cultura popular gracias a franquicias como Jurassic Park.

La primera entrega de la serie gozó de la simpatía de la gente porque se percibía como una versión futurista de Resident Evil y nos planteaba nuevamente un escenario ficticio que podría ser real si a la ciencia se le escapara de las manos.

Durante la aventura nos ponemos en las botas de Regina, una súper agente que, al lado de su equipo va en busca de un científico que está realizando actividades ilícitas dentro de un complejo clausurado, allí conocemos más acerca de sus investigaciones energéticas en una interpretación del año 2009 que, a diferencia de otras historias contemporáneas, no imaginó el futuro como algo perfecto y lleno de progreso, sino catastrófico.

Tanto Resident Evil como Dino Crisis dejan caer el peso de sus historias en el miedo del ser humano hacia lo desconocido y la soledad; ambos también reflejan las consecuencias del peligro biológico y lo que el hombre mismo podría llegar a ocasionar si las cosas se salen de control. Ese fue justo el gancho hacia el éxito.

Dicho éxito dio luz verde a una secuela, pero es importante mencionar que para ésta era importante encontrar la forma de volver a una serie distinta de la otra. Así que Dino Crisis 2 marcó sus propias reglas y readaptó el gameplay en cámara fija con una mobilidad aún más versátil, un sistema de combos y puntaje para mejorar nuestro arsenal; también enriqueció la experiencia de acción con la eliminación del aislamiento ya tan tradicional a través de la adición de un nuevo personaje principal, Dylan, quien acompañó a Regina en la aventura.

Team Arklay’s al rescate

Hoy contaré una historia que quizás al principio parezca innecesaria en este artículo, prometo que trae un punto consigo. Es la historia del estudio italiano Invader Studios y la suerte con la que corrió para el desarrollo de su primer juego Daymare: 1998. Quizás muchos la puedan recordar.

El año pasado todos nos deleitamos con el súper pedido remake de Resident Evil 2. Mucho he hablado sobre cómo ha rejuvenecido a una franquicia que pese a que aún continúa siendo un hit en ventas, ya comenzaba a generar descontento entre propios e incluso extraños.

Antes de que siquiera Resident Evil 2 fuera aprobado por Capcom, había un grupo de fans que decidió tomar manos a la obra en lugar de esperar; ellos eran Invader y mostraron al mundo un proyecto en desarrollo que con ayuda de los assets de Darkside Chronicles adaptados a una perspectiva en tercera persona, nos dio una maravillosa idea de cómo luciría ese clásico del terror en nuestros tiempos.

Este pequeño proyecto provocó revuelo. Los fans enloquecieron con peticiones a Capcom para demostrar que crear un remake de Resident Evil 2 no era una idea tan descabellada… lo demás es historia.

Para Invader hubo malas y buenas noticias. Empezando por el hecho de que Capcom pidió que frenaran el desarrollo de su propio remake porque ellos trabajarían ahora en el oficial; la compañía invitó al estudio a sus oficinas ubicadas en Osaka para compartir ideas y darles un tour.

Invader compartió la noticia con un júbilo extraño; poco tiempo después decidieron aprovechar lo ya aventajado en sus investigaciones para iniciar desde cero con lo que posteriormente fue Daymare: 1998, juego que por todos lados rinde un homenaje a las historias de Resident Evil con algún tinte preciso de Dino Crisis y Dead Space.

Incluso, el desarrollo de Daymare contó con la participación de Paul Haddad, actor que prestó su voz al Leon S. Kennedy original y que lamentablemente falleció hace poco tiempo; y del diseñador de criaturas para títulos de Resident Evil como Code: Veronica.

Esta historia con finales felices por ambos lados, podría tener una oportunidad potencial para repetirse gracias a Team Arklay’s; un pequeño equipo que quiere probar con la misma suerte de la que alguna vez gozó Invader y que ya tiene bastante tiempo desarrollando un remake fan-made de la primera entrega de Dino Crisis.

Este proyecto al que bautizaron como Revival, ha sido un buen pretexto para que los fans atrincherados de Dino Crisis vuelvan a salir a la luz y aunque Capcom todavía no hace ningún pronunciamiento al respecto, en varias ocasiones sus ejecutivos así como gente involucrada del proyecto original –que aún trabaja en la compañía– han mencionado que no descartan la posibilidad de renacerla de las cenizas.

De hecho, el perfil de la comunidad de Dino Crisis es uno por el que Capcom está llevando sus planes: en su último reporte anual, mencionó que las franquicias de antaño y los remakes han resultado ser una vía muy fructífera en términos de ventas, por lo que continuarán yendo por ese sendero hacia el desarrollo de más secuelas de dichas franquicias. La condición siempre ha sido que los fandoms se expresen lo suficiente para que entonces los altos ejecutivos regalen esa luz verde que tanto esperamos.

El eterno cliffhanger

Otra particularidad que vive en la historia de Dino Crisis es que para muchos, la serie se estancó luego del final de Dino Crisis 2, porque cerró con un cliffhanger en el que [SPOILER] Regina utilizó un portal para volver al pasado y remediar el futuro. Esta acción no solamente eliminaría el incidente en el que se desarrollan los hechos, sino que también rescataría a Dylan del pasado –que se estancó en el futuro– y a su hija Paula –a quien conoció en el mismo futuro–.

Todos pensábamos que veríamos el magno suceso cuando Dino Crisis 3 llegó de forma exclusiva a Xbox años después (en 2003), pero a cambio tuvimos un reboot de la historia con… dinosaurios en el espacio y un elenco sin gracia que en conjunto terminó de acomodar los clavos de un ataúd que aún permanece cerrado.

Aún así, nadie se conforma con el hecho de que con el lanzamiento de Dino Stalker –el tercer título de la serie Gun Survivor, lanzado en 2002– se resolvió la eterna pregunta de si Dylan y Paula sobrevivieron gracias a Regina, ya que las respuestas nunca fueron precisamente claras y, al ser un título perteneciente a una serie de spin-offs que cumplían otros propósitos, no fue considerada siquiera una respuesta canónica, así que muchos aún continúan esperando una de dos cosas: que la historia principal de Dino Crisis retorne a través de una serie de remakes o bien, que se desarrolle un verdadero Dino Crisis 3.

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La respuesta final solamente la tendría Capcom en algún punto, Dino Crisis dejó de existir principalmente porque pisó de forma poco afortunada en ese momento de la compañía en la que la monotonía empezaba a impactar sus estimados en ventas y títulos como Resident Evil 4 apenas y fueron suficientes para reinventarse.

Personalmente creo que las bondades del RE Engine, el aprendizaje de títulos como RE7 y RE2, así como este impulso tomando como base la nostalgia, podrían abrirnos esa poca esperanza que queda ahí. Mientras tanto, si nunca han probado Dino Crisis y son afortunados de tener una consola compatible con PlayStation 1, no pierdan la oportunidad de hacerlo.

Visita el proyecto de Team Arklay’s