¿Qué es lo que esta increíble y desafiante entrega de ritmo tiene para mostrar?
La industria de los videojuegos ha sufrido transiciones importantes a lo largo de las décadas, transiciones que generalmente han ido de la mano de la evolución de las capacidades tecnológicas de hardware y software en cada generación. A su vez, es inevitable que se creen tendencias en las casas desarrolladoras en función de ir acorde a los estándares del público, dado a que ya muy pocos se arriesgan a que uno de sus juegos no tenga un éxito en ventas.
La razón de la premisa anterior se remite a que cada uno de nosotros pensemos acerca de las pocas propuestas nuevas y refrescantes que tenemos oportunidad de disfrutar en nuestras consolas, aquellas propuestas que buscan ser honestas con una idea simple en complicidad de una apuesta arriesgada por no ir con el flujo del resto de la industria, aquellas propuestas que su objetivo más claro como videojuego es otorgar diversión. Con estas ideas en mente pensé en escribir acerca de la serie de Rhythm Heaven.
Rhythm Heaven fue desarrollado por el estudio Nintendo Software Planning & Development y cuenta con tres títulos a la fecha, el primero llamado Rhythm Tengoku (2006) exclusivo para Game Boy Advance únicamente lanzado en Japón, los dos siguientes fueron lanzados también en América y Europa, Rhythm Heaven (2008) para Nintendo DS y Rhythm Heaven Fever (2012) para Wii.
Rhythm Heaven es un juego de ritmo, si bien no es el único en el género, probablemente haya sido el primero en ayudarse exclusivamente de pistas auditivas para introducir al usuario a continuar un patrón rítmico en su cabeza, dado que las pistas visuales existen pero en ocasiones son engañosas, a diferencia de otros juegos, como aquellos que emplean el uso de instrumentos (Guitar Hero, Rock Band) o la serie de Final Fantasy Theatrhythm en los que el jugador puede seguir pistas visuales para adelantarse a las notas que se pretenden tocar. En otras palabras, estos últimos ejemplos pueden ser jugados sin audio. Sin embargo, realizar comparaciones de Rhythm Heaven con otros títulos simplemente se convierte en una discusión sin sentido.
Cuando consumo cualquier tipo de producto literario o audiovisual, me gusta emprender el viaje desde una perspectiva completa, en otras palabras, conocer el contexto sociocultural que rodea esa obra en particular, además del contexto personal de las personas que la crearon, de esta manera el usuario puede tener una experiencia completa dado que puede generar interpretaciones más acertadas en todos los niveles de la obra. Si observamos a Rhythm Heaven bajo está lupa, a ninguno nos quedará duda que estamos frente a un regalo de Japón para el mundo…
Rhythm Heaven es uno de esos juegos que muy pocos se explican cómo fue posible que llegara a América, dado que “no se ajusta a los famosos estándares occidentales”. El juego se compone por una serie de mini-juegos de ritmo, cada uno de ellos es ambientado con una escena visual que parecieran haberse tomado al azar de entre una lista descabellada de ideas. Por ejemplo una pareja sentada en un parque teniendo una cita, el chico tiene que patear balones que se acercan; una reportera entrevista a un luchador profesional mientras este posa para los fans; tres chicos vocalizan graves y agudos para el coro de una orquesta o un samurai en el tope de una colina masacrando entes malignos, por mencionar algunos ejemplos de la extensa y extravagante lista.
La animación fue realizada al mero estilo anime oriental, podría decir que con un estilo sencillo pero bien hecho, dado que no pretende crear modelos altamente detallados, lo cual es parte de la misma personalidad original, el famoso keep it simple, focus in the fun.
Mantener todo el contexto simple implica que su gameplay también lo sea, en la versión de NDS las secuencias rítmicas se marcan simplemente con movimientos intuitivos de la pantalla táctil, en ocasiones implican toques rápidos, otros sostener el impacto un pequeño periodo de tiempo y finalmente algunos un movimiento de barrido.
Digo que son intuitivos porque cada secuencia encaja muy bien con lo que escuchas y posteriormente con lo que ves en pantalla como resultado. La versión de Wii únicamente emplea el uso de los botones A y B. Por más simple que pueda sonar esto, el juego tiene un reto bastante decente, dado que califica el desempeño con un simple OK, buenas actuaciones merecen un Superb y finalmente ningún fallo implicará un Perfect Performance, un mejor desempeño otorga medallas que funcionan para desbloquear juegos extras o modalidades de juego infinito para afinar las habilidades en los mini-juegos favoritos.
Este mes de junio se estrenó Rhythm Heaven Megamix en la Nintendo eShop del 3DS, este título recopila más de los mejores 70 mini-juegos de ritmo de las tres entregas de GBA, NDS y Wii, sin duda alguna esta es la mejor oportunidad de entrar al fantástico mundo rítmico, colorido, japonés y alegre que nos ofrece Nintendo.