Sólo tu ingenio y rapidez mental, te ayudarán a sobrevivir en esta aventura independiente desarrollada por el estudio neerlandés Noio.
En un reino de islas divididas por la marea y la nieva, han aparecido diversas criaturas misteriosas por la noche. Nadie sabe de dónde provienen, pero dos cosas son ciertas: son altamente hostiles y son atraídas hacia el oro.
Como te imaginarás, las coronas que posan sobre la cabeza de los monarcas, no escapan a la avaricia de estos seres agresivos. Por lo tanto depende de ti, un noble montado en un caballo, combatir esta amenaza nocturna, así como crear un santuario seguro para tus súbditos. Y todo deberás conseguirlo, sin perder tu artefacto real ni tu cabeza.
Si quieres un reino, debes pagar por él
En Kingdom: New Lands, asumirás el papel de un dirigente real sin nombre y deberás poner a salvo tu corona de ser robada por las siniestras criaturas. Al mismo tiempo, tendrás que fundar y fortificar los asentamientos que se encuentran localizados en diferentes islas. Como no podrás quedarte en una lugar por mucho tiempo, tu única opción será reconstruir varios barcos escondidos a lo largo del territorio.
De entrada, puedo decirte que el argumento de Kingdom: New Lands es muy sencillo y recae fuertemente en sus mecánicas, para poder disfrutarse al máximo.
El escenario en donde humanos y monstruos interactúan entre sí, es un espacio de dos dimensiones. Como jugador la manera de interactuar con ellos, será mediante monedas de oro. Dichos ítems te ayudarán a montar un campamento, reclutar aldeanos para cumplir diferentes roles o pagar las herramientas para que tu pueblo lleve a cabo diferentes tareas.
Por si lo anterior no fuese suficiente, tus recursos dorados te permitirán modificar el entorno: derribar árboles para poder construir expansiones para su dominio, atacar los portales de donde emergen tus enemigos, crear granjas o cazar para conseguir más monedas, entre otras opciones
Sin sacrificios no hay victoria
Las distintas clases de profesiones que se pueden asignar a los aldeanos reclutados están indicadas con símbolos. Mientras que los arqueros se encargan de cazar a los animales silvestres y atacar a los monstruos a distancia, los obreros se encargan de talar árboles, construir y reparar edificios, mismos que pueden ser reparados pagando una determinada cantidad de oro.
Aparte los sirvientes del rey, tras ser reclutados, se distribuyen por partes casi iguales en los lados izquierdo y derecho del feudo. Con una inteligencia artificial que opera siempre en automático, darles herramientas para trabajar será indispensable para que todos sobrevivan los ciclos diurnos y nocturnos.
Algo que noté mientras me adentraba en Kingdom: New Lands, es que estas zonas de trabajo para los NPC no siempre están bien definidas. Por lo tanto, nunca sabrás en qué momento la mano de obra llegará a su puesto asignado. El escenario anterior, puede ser positivo o negativo si eres fan de los títulos con una jugabilidad tensa y una lucha contra reloj.
Como protagonista, gastar la monedas con cuidado y en el momento adecuado será una de tus principales prioridades, pues ciertas acciones tuyas o las de tus vasallos, pueden eliminar la presencia de algún tipo de recurso en específico permanentemente. Puedo decirte con certeza, que la manera en cómo explotar los recursos estará completamente a merced de tu criterio.
Aventuras en un reino de pixeles
A pesar de contar con un breve tutorial, Kingdom: New Lands rápidamente me dejó en libertad para descubrir el mapa, así como investigar el propósito de todos los objetos localizados en ambos extremos. El hecho de que el juego no tiene miedo de soltarte las riendas y hacer que aprendas con base en el ensayo y error, es uno de los méritos más destacables de este título.
Otro factor positivo de este videojuego es el detalle en sus gráficas y cómo el paso de los días impacta en la obtención de recursos. Haciendo uso de un bello pixelart, serás testigo de cómo cambia el paisaje. Al mismo tiempo, deberás estar al pendiente en la manera en que las diferentes estaciones ,afectan la disponibilidad de especies animales, el agua para las granjas, etc.
Lo anterior, se vuelve aún más importante para sobrevivir a las oleadas de criaturas que asaltarán al reino por la noche y cuya ferocidad aumentará con el tiempo. Para llegar a la mañana siguiente, deberás planear y administrar sabiamente su siguiente movimiento, pues un error te costará la partida entera.
Ningún rey está libre de defectos
Pese a que Kingdom: New Lands, cuenta con un buen nivel de reto, varias horas tanto de tensión como de satisfacción y un apartado gráfico que tiene un impacto tanto en la apariencia del jugo como en su gameplay, no es perfecto.
La manera en cómo están programados ciertos personajes no controlables por el jugador (de manera directa) podrá causarte derrotas que pudieron haberse evitado. Ejemplo de estos errores de programación son: jornaleros que no regresan a la base cuando cae la noche y se exponen innecesariamente al ataque de los monstruos, catapultas que no se repliegan cuando una muralla es destruida, constructores que no cesan de laborar pese a tener al enemigo cerca (queriendo huir cuando ya es demasiado tarde), entre otros escenarios que conducen al desastre.
Esos pequeños detalles, arruinan la experiencia del juego porque no forman parte de las decisiones de uno como usuarios, sino dependen de quién elaboró el videojuego y sus reglas.
En conclusión, Kingdom: New Lands es un divertido juego que no tiene reparos en dejar que tú o yo nos equivoquemos, tiene un ritmo rápido que te forzará a estar vigilante de todo lo que pasa dentro y fuera del reino.
También es adictivo y otorga una satisfacción genuina cuando se completa cada escenario o nivel. Sus errores de programación, merman un poco esta experiencia de juego, haciéndolo un poco injusto, pero en general es una buena experiencia. Este videojuego se encuentra disponible para PC, PlayStation 4, Mac, Linux, Xbox One, Nintendo Switch, iOS y Android.