Reseña | Tony Hawk’s Pro Skater 1 + 2

Esta remasterización es prueba del poder de relanzar un clásico. También es testamento de que tan bueno era y sigue siendo hasta la fecha.

El deporte extremo del skateboard siempre ha sido uno de los más llamativos. La cantidad de trucos y maniobras que se pueden realizar con la patineta es enorme. Constantemente se inventan nuevos trucos y en general la escena busca crecer y ser más visible, culminando con su inclusión como una competencia en las Olimpiadas de Tokyo para el próximo año.

Probablemente la figura más conocida de este deporte es Tony Hawk, que gracias a su esfuerzo, ha logrado darle una visibilidad con la que años antes no contaba. Es por eso que a finales de los noventa, Activision se le acercó; lo que ninguno de ellos sabía, es que el juego resultante se volvería en uno de los más populares de la década e inicios de los 2000. Volviéndose en una franquicia muy exitosa para la compañía, con varios spin-offs, y llevando la popularidad del deporte a nuevos niveles.

Como toda franquicia ha tenido sus altos y bajos, un ejemplo notorio es la última entrega de 2015, Tony Hawk’s Pro Skater 5, que fue fuertemente considerado como uno de los peores juegos de esta generación tanto por la crítica como la audiencia.

No obstante y a pesar de un futuro incierto, las cosas mejoraron hace unos meses cuando Activision anunció la remasterización de los primeros dos juegos de la serie en un solo paquete. La nostalgia noventera sin duda es muy tentadora, pero… ¿qué tan bien, o mal, han envejecido estos juegos? ¿Es este un excelente retorno al inicio o solo una excusa para saquear la cartera? Hoy traigo la respuesta.

Puro truco loco

Si hay algo que ha definido la consolidación de la serie, sin duda es el divertido gameplay. Un mal trabajo entonces podría llevar al desastre como ocurrió en la entrega que mencioné previamente; pero en esta ocasión es todo lo contrario.

Gracias al simple, pero muy claro y efectivo tutorial, el realizar maniobras, piruetas en el aire y todo tipo de trucos es extremadamente fácil de lograr. No tienes que aprenderte combinaciones raras de botones al estilo de Street Fighter o algo por el estilo, todo consiste simplemente en saber cómo juntar todo lo anterior para hacer largos combos que te den una alta puntuación bajo un limite de tiempo. Este simple, pero efectivo gameplay, nos da como resultado una experiencia fácil de jugar pero difícil de dominar y por ende, muy satisfactoria y adictiva.

Tienes posibilidades prácticamente ilimitadas sobre cómo llevar esto a cabo porque cada escenario es grande, variado y diferente entre sí; y los trucos que puede realizar cada patinador en particular son diferentes. El juego te da todas las herramientas que necesitas para que pases de ser un novato a todo un profesional del deporte que realiza las acrobacias más extremas en los lugares más difíciles.

Solo te pide tiempo, dedicación y a cambio el juego te lo recompensará apropiadamente. Cuando eliges un escenario, puedes elegir entre patinar libremente o bajo un límite de tiempo. En el primero hay libertad absoluta que puedes usar para aprender los niveles y practicar.

En el segundo modo tienes 2 minutos para patinar y en ese intervalo de tiempo tienes varios objetivos a cumplir; van desde conseguir alto puntaje, realizar maniobras difíciles, interactuar con elementos del escenario y coleccionar letras que forman la palabra SKATE, un video secreto y elementos coleccionables relacionados al nivel. A este modo lo considero como el principal debido a que es en donde se va a notar más tu progresión a la hora de completar el juego y desbloquear los secretos. También es el que más te invita a trabajar duro y realizar lo imposible para mejorar debido al límite de tiempo en cada nivel y los coleccionables y retos disponibles.

En resumen. El juego nos demuestra porque la fórmula original de la serie sigue estando vigente y tan efectiva como hace 20 años. Ahora, tenemos un robusto tutorial para practicar, el control adaptado a las nuevas consolas (y con la capacidad de personalizarlo si quieres que se juegue exactamente como el primer o segundo juego) y una buena cantidad de cosas qué hacer en cada nivel. Gracias a todo esto tenemos un juego sólido y muy divertido de jugar.

Recordar es volver a vivir

Pero estas mecánicas y controles serían un desperdicio sin un buen diseño de niveles. Estas tienen una relación simbiótica con ellos, es decir, sin uno no puedes tener el otro. Ya que. ¿Para qué hacer estas maniobras intensas y hacer el esfuerzo por coleccionar los objetos del nivel si estos te limitaran o te pusieran restricciones absurdas? Los niveles son excelentes, son enormes, preciosos y llenos de lugares para experimentar y probar todas las bravuras que el juego permite. Podrás hallas manubrios, pasamanos, rampas, y créeme, a pesar de que revisites cada uno repetidas veces, nunca te aburrirás.

Los niveles son muy variados. Desde locales cerrados y abandonados llenos de cientos de elementos olvidados qué usar para patinar, parques de patinaje con todo tipo de obstáculos, campos de construcción, escuelas, parques públicos y más.

Los niveles son más hermosos que nunca gracias al Unreal Engine e invitan a que experimentes en todos lados para mejorar tu score y conseguir los coleccionables para desbloquear el contenido extra. Francamente es un deleite adictivo el probar escenario tras escenario y descubrir qué nuevas cosas hay en ellos, o regresar a niveles pasados y sacar el potencial oculto en ti y en tu habilidad.

La onda retro noventera

Además del modo principal, están el multijugador local y en línea además de un creador de escenarios. El multijugador es una competencia por ver quién es el que más puntos realiza en un periodo de tiempo limitado. Aunque es genial jugar en línea, el local es definitivamente lo mejor, siempre es una experiencia amena el tener a tu amigo/pariente a un lado y ponerse a hacer tontería y media en el escenario.

Por otro lado, la creación de niveles es excelente para probar tu imaginación y realizar escenarios que te permitan hacer cosas que no crees que sean posibles con los niveles de los juegos. Las herramientas de creación son bastante potentes así que siéntete libre de usarlas al máximo y sacarles provecho. Aunque en un inicio estás un poco limitado respecto a las cosas que tienes disponibles, conforme vas jugando vas desbloqueando material para usar en el creador.

Finalmente, el soundtrack, una mezcla de sonidos punk rock con mucha personalidad le dan identidad al mundo del skateboarding y te ponen en el humor correcto para ponerte a patinar, es pegajoso y una excelente selección de bandas que sin duda le agradará incluso a la gente que no le gusta el género de la música en cuestión.

También el arte es excelente. Si bien es un estilo realista, hay mucho color y énfasis en arte callejero y grafiti y en general se tiene un estilo muy tranquilo, buena vibra que combina con el coolness de la serie y de la vibra californiana.

Uno se puede sentir relajado jugando esta hermosa colección. Hay un amplio nivel de personalización en el juego, puedes hacer a tu propio patinador, recibir recompensas por retos cumplidos, personalizar tu patineta y cambiar los stats de tus personajes. Al final del día es un juego que te recompensa por dedicarle tiempo.

Si hay que mencionar defectos, realmente solo resaltan tres en mi experiencia: el primero es que de pronto el juego tarda en cargar las texturas cuando inicias un nivel o inicias el juego, de manera que hay luego periodos de tiempo en los que tienes texturas cargándose mientras el nivel ya está en marcha.

Segundo, inexplicablemente, el juego tiene bajas de framerate cuando se está en el menú principal, francamente no tengo la menor idea de por qué pasa esto y es una inconsistencia muy grave para un juego que mantiene su framerate constantemente cuando ya uno está jugando.

Finalmente las opciones de personalización de tu personaje, aunque buenas, no son particularmente profundas y podrían haberlo profundizado más.