Reseña | Forza Horizon 5 – México mágico

La nueva edición del festival Horizon llega a nuestro país, el lugar perfecto para continuar con los autos veloces, la música y la fiesta.

Una de las mayores críticas que recibió el Xbox Series X en su momento fue que no contaba con un lineup de lanzamiento con títulos first-party que nos permitieran comenzar a vivir la nueva generación. A pesar de eso, el futuro de la consola resultaba prometedor, pues juegos como Halo Infinite, Senua’s Saga: Hellblade II, Forza Motorsport y Everwild ya habían sido confirmados, pero con la incertidumbre de que no se sabía exactamente cuándo podríamos disfrutar de ellos –y de la mayoría seguimos sin saberlo–.

Es por eso que cuando Forza Horizon 5 fue presentado por primera vez en el E3 de este año, la gran sorpresa –además de estar ambientado en México y mostrar un increíble apartado visual– fue que sólo tendríamos que esperar unos meses para ponernos detrás del volante y asistir a una nueva edición de este festival.

Y es así como de un día para otro estalló el hype por este juego, no sólo en los seguidores de la franquicia, sino en todo aquel curioso por recorrer la versión virtual de nuestro país. Si bien la saga Forza Horizon se ha caracterizado por ofrecer títulos de una alta calidad, ¿será que esta quinta entrega está a la altura de las expectativas?

Seguro ya sabes la respuesta; pero si quieres saber por qué, pónte cómodo y acompáñame a disfrutar de este increíble road trip.

Superestrella consagrada

Contar una historia nunca ha sido el principal objetivo de los Forza Horizon, sin embargo, cada entrega ha tenido pequeños arcos narrativos que sirven como pretexto para expandir el festival y pasar de ser el típico novato a ser el número uno.

En esta quinta edición del festival Horizon nos trasladamos a tierras mexicanas ya como una superestrella de la conducción tras mostrar nuestras habilidades en Reino Unido –Forza Horizon 4– . Así que no será necesario empezar desde abajo ni ir ganando el respeto de todos, aquí el “objetivo” es hacer crecer el evento por todo el país mientras competimos por poner nuestro nombre en el salón de la fama y así convertirnos en leyendas. Un argumento bastante simple, pero no se necesita más.

Como ya es tradición, el juego inicia con una emocionante carrera que no sólo sirve como bienvenida al festival, sino que también nos da una pequeña probada de todo lo que nos espera: Un descenso a toda velocidad de un volcán, descubrir ruinas mayas en medio de la jungla, perseguir tormentas de arena… ¡Bienvenidos a México!

México mágico

Iré directo al grano: La representación que hizo Playground Games de México quedó espectacular. La atención que puso el estudio británico a cada uno de los detalles que conforman este mundo nos habla del amor y la pasión que hubo por este proyecto.

Los Cabos, Guanajuato, Barranca del Cobre, Teotihuacan, Uxmal y Tulum –entre otros– están plasmados de una manera tan fiel que incluso ya se han hecho videos comparando la versión real con su contraparte digital para apreciar el gran trabajo realizado.

Pero más allá de los paisajes o las construcciones icónicas de cada región, lo que verdaderamente me sorprendió fue esa sensación de que realmente estaba ahí, era como si me transportara a algún otro momento de mi vida. A los viajes en carretera con mi familia, a las callejoneadas en Guanajuato o a cuando viví en la Riviera Maya. Es como si se pudiera sentir el sol y la brisa a través de la pantalla.

Este “mini México” está conformado por diferentes biomas que lo convierten en el lugar ideal para albergar el festival Horizon, pues se puede pasar de una carrera en buggies por las dunas de Baja California a manejar un todoterreno entre ruinas mayas. Lo mejor de todo es que este cambio entre zonas se siente de manera muy natural, es decir, no es evidente en qué momento termina el desierto y comienza la selva.

A pesar de ser un mapa bastante grande que cuenta con fast travel, la belleza de sus paisajes hace que ir de punto A a punto B sea una experiencia agradable por más larga que sea la distancia. Es un mundo abierto que incita a manejar sin rumbo fijo y perderse para descubrir todo lo que tiene por ofrecer.

Hora de brillar

Al comenzar Forza Horizon 5 es necesario elegir un avatar que nos personifique en el festival. Estos ya están predeterminados, así que físicamente no se le podrá hacer ningún cambio más allá del estilo y color de cabello. A pesar de eso, hay suficientes opciones como para sentirse representado de la mejor manera

Esto ya se había implementado en Forza Horizon 4, por lo que me gustó poder elegir al mismo piloto que utilicé en aquella ocasión y así sentir que le estaba dando continuidad a lo realizado en Reino Unido. Si bien no hay forma de modificar a nuestro protagonista, sí hay una gran variedad de ropa y accesorios que podemos comprar o ganar para darle un estilo único.

Uno de los añadidos para Forza Horizon 5 es que ahora nuestro personaje ya tiene voz, ésta se puede elegir a la hora de crearlo y es posible cambiarla en cualquier momento. Pese a que sus participaciones no son muchas, se agradece que ya pueda entablar conversación con los demás personajes del festival.

El juego cuenta con buenas actuaciones de voz tanto en español latino como en inglés, pero sentí adecuado elegir la versión anglosajona porque a fin de cuentas es un festival extranjero llegando a nuestro país.

Si no está roto, no lo arregles

Tras cuatro entregas de esta saga, queda claro que la fórmula de un festival de autos está más que probada y validada. Si bien entre cada título ha habido algunos cambios, la esencia del juego se ha mantenido intacta a lo largo de los años. De ahí la duda si Forza Horizon 5 sería más de lo mismo, y no porque lo anterior fuera malo, sino porque se corría el riesgo de estancarse y terminar siendo una experiencia monótona al poco tiempo.

La magia de este juego radica en que tiene mucho por ofrecer pero sin llegar a sentirse abrumador; más bien se tiene la libertad de poder irlo descubriendo a nuestro ritmo. Como ejemplo, tardé poco más de 10 horas en acercarme a las competencias en Guanajuato porque en un inicio me centré en completar carreras y explorar las regiones de Baja California y la Riviera Maya.

Además de participar en toda competencia que se nos atraviese, nuestro objetivo es ayudar a los organizadores del evento a expandirlo por todo el país. Para ello es necesario ir completando una serie de “misiones” que se van desbloqueando cuando juntamos los Puntos de Premio (PR) requeridos, los cuales se obtienen principalmente de las carreras.

Estas misiones son variadas, pero básicamente consisten en explorar cierta zona con alguno de los anfitriones, completar un desafío o participar en las ya clásicas carreras contra otro medio de transporte. En lo particular, mi misión favorita fue una en la que tuve que manejar un carro alegórico en un desfile en la playa para después destruirlo, pues son justo estas libertades creativas –que llegan a rozar en lo absurdo– lo que le da vida y un espíritu de fiesta al festival. 

En cuanto al resto de las competiciones, el juego se divide básicamente en cuatro tipos:

• Apex: Carreras en asfalto.
• Wilds: Carreras que mezclan asfalto y terracería.
• Baja: Carreras a campo traviesa.
• Street Scene: Carreras callejeras.

Cada una de estas modalidades tiene su encanto, pero si tuviera que quedarme con una sería Wilds. La sensación de manejar un todoterreno por caminos enlodados para luego atravesar un río a toda velocidad es simplemente maravillosa.

En pocas palabras Forza Horizon 5 sí es más de lo mismo, pero todo llevado a un nivel más arriba; pues a pesar de que no hay algún elemento realmente innovador, el juego consigue adentrarnos en su mundo gracias a la variedad de contenido que ofrece y a la forma en que  vamos avanzando en el festival. 

El arte de la conducción

Uno de los principales atractivos de la saga Horizon es que su jugabilidad se aleja del realismo que Forza Motorsport busca ofrecer, pero sin caer en una conducción arcade tipo Need for Speed. Digamos que se encuentra en un punto medio y es precisamente eso lo que hace que sea una experiencia divertida.

Se distingue el peso de cada uno de los autos y la reacción que tienen a las diferentes superficies. Al tomar una curva se puede sentir en qué momento es necesario dejar derrapar el coche y cuándo pisar el acelerador para salir de ella. De igual manera, no bajar la velocidad a tiempo implica terminar contra el muro de contención o fuera del camino.

Pero no  hay de qué preocuparse, no es necesario ser un veterano del género para disfrutar de Forza Horizon 5. El título se puede ajustar al nivel de habilidad de cada jugador, pues además de subir o bajar la dificultad de la inteligencia artificial, también se pueden activar ayudas que se adapten a los diferentes estilos de juego; tales como utilizar transmisión automática, asistencia de frenado o la opción de rebobinar. Claro, también es posible desactivar dichas asistencias y disfrutar de carreras más cercanas a la simulación. 

La inteligencia artificial suele ser inconsistente. Hay veces en las que es imposible alcanzar a los rivales sin importar que se realice un trayecto perfecto y otras en las que es fácil colocarse al frente desde la primera vuelta. Mi recomendación para ganar las carreras “imposibles” sin caer en la frustración sería bajar la dificultad de la IA sólo para ese evento, cambiar de auto o tunear el que estemos utilizando.

En lo personal no soy fan de andar modificando mis autos, prefiero usarlos así salidos de agencia más que nada porque no me gusta pasar tanto tiempo en los menús. Aun así me gustó ver que las modificaciones se pueden hacer de manera clara y sencilla, pues cada ajuste indica para qué es y qué impacto tiene en el vehículo. También se pueden realizar tuneos rápidos gracias a las mejoras automáticas hechas por el mismo juego o por otros usuarios.

De la vista nace el amor

En Xbox Series X –consola utilizada para hacer esta reseña– se puede jugar Forza Horizon 5 en dos modos: calidad o rendimiento. El primero ofrece una mayor calidad de imagen en 4K y a 30 FPS, mientras que el segundo sacrifica un poco el nivel de detalle visual para lograr alcanzar los 60 FPS igual en resolución 4K.

Tras estar alternando entre ambos modos durante mis primeras horas, terminé prefiriendo el modo rendimiento ya que el juego se sigue viendo bastante bien y se siente muy fluido. Algo que se aprecia más en este género.

Como ya mencioné anteriormente, el mundo que construyó Playground Games luce espectacular; sin embargo, el juego no está exento de algunos pop-ups mientras vamos manejando y alguno que otro elemento visual que rompe con la inmersión en la que nos encontramos. 

Creo que mis mayores quejas en este apartado son dos: La primera es el reflejo de los autos en los espejos y la segunda es lo vacío que se siente el mundo. Me explico:

A la hora de participar en una carrera a mí me gusta jugar con la vista desde adentro del auto –en la que se ve el volante y las manos– para tener una experiencia más “realista”; sin embargo, el encanto se rompe cuando volteo al retrovisor y veo que mis rivales parecen salidos de un juego de PlayStation 1. Lo que más llama mi atención es que en Forza Horizon 4 esto no pasa, ahí dichos reflejos se ven bastante bien y coinciden con el resto de lo que está pasando en pantalla.

Lo mismo pasa con la cantidad de autos civiles que hay por todo el mapa, pues las carreteras están prácticamente vacías al igual que los poblados. Llegar a Guanajuato y verlo desértico me hizo sentir que todos seguían en confinamiento. Tampoco me hubiera gustado ver las calles repletas, pero creo que Forza Horizon 4 tenía el número adecuado de vehículos circulando como para que el mundo se sintiera vivo.

Al igual que en su predecesor, en Forza Horizon 5 se mantienen las cuatro estaciones del año que van cambiando cada semana. Sin embargo, las diferencias no son tan evidentes como en Reino Unido que de un día para otro amanecía nevado, aquí los cambios tienen que ver más con la probabilidad de presenciar lluvias en verano, tormentas eléctricas en otoño o tormentas de arena en invierno. Esto se entiende debido al clima de nuestro país, pero aun así me hubiera gustado una mayor autenticidad –no necesariamente climatológica– entre una temporada y otra.

Casi te gano

Además de las carreras single player, Forza Horizon 5 ofrece una variedad de modos para jugar en línea; ya sea compitiendo directamente con otras personas o interactuando con contenido creado por la comunidad. 

Para jugar con amigos es necesario crear un convoy; éste hace que todos estén en un mismo servidor y así puedan recorrer juntos las carreteras mexicanas, participar en algún evento o simplemente iniciar una expedición. Encontré bastante divertido poder convivir con mis amigos en autos de lujo; por desgracia, en ocasiones no podíamos iniciar partidas por problemas en los servidores y en otras no logramos vernos por más que estuviéramos en el convoy y en el mismo lugar del mapa. Ojalá esté problema quede resuelto pronto.

Una de las novedades en Forza Horizon 5 es Horizon Tour, un evento en línea en el que es necesario hacer equipo con otros jugadores para derrotar a la IA en carreras por todo México. También está de vuelta el Eliminador, el Battle Royale de Forza. Aquí el objetivo es llegar a la zona marcada antes de que el mapa se cierre, de lo contrario, todo auto que quede fuera estará eliminado.

En lo personal no soy mucho de jugar Forza en multijugador, así que estos modos serán los que menos juegue en un futuro. Pero estoy seguro de que más de uno disfrutará de estas opciones porque además premian con grandes recompensas.

Por el otro lado, el contenido creado por los usuarios sí me mantuvo enganchado por varias horas gracias a lo absurdo –pero entretenido– que llegaba a ser, como recorridos en la jungla al más puro estilo de Jurassic Park o carreras en las que se tienen que tirar la mayor cantidad de pinos de boliche.

Sube el volumen

Para finalizar me gustaría destacar la gran selección musical con la que cuenta el juego, algo que se ha vuelto una constante en la franquicia. Las estaciones de radio están de vuelta y cada una cuenta con un género distinto. ¿Mis favoritas? Horizon Pulse y Horizon XS, de pop y rock respectivamente. Nada como conducir a toda velocidad con música de Gorillaz, Royal Blood, Hot Chip y Dua Lipa.

Por desgracia, después de escuchar una misma estación se siente repetitiva al poco rato; así que mi recomendación sería estar alternando entre dos o tres para añadir más variedad.

Conclusión

Ya lo había escuchado en algún otro lado pero tras haberlo jugado lo confirmo: Forza Horizon 5 es una bella carta de amor a México.

La manera en que Playground Games logró representar a nuestro país sirve para darle al mundo un pequeño vistazo de todo lo que puede encontrar aquí y así romper ciertos prejuicios que se puedan tener. Se siente un México auténtico, cálido y colorido. Me encantaría que en un futuro podamos ver un documental de cómo fue la creación de este juego.

Estamos sin duda ante la mejor entrega de la saga, pues toma lo mejor de entregas pasadas y lo combina para ofrecernos una versión mejorada del festival Horizon. No sé por cuánto tiempo más continúe funcionando esta fórmula antes de tener que reinventarse, pero por ahora sigue siendo una experiencia divertida y sumamente adictiva.

No olvides que el juego está disponible para Xbox One, Xbox Series S, Xbox Series X y PC.