El veterano jugador, empezará a juntar pruebas para comprobar su legítima posición como campeón de Donkey Kong, Pac-Man y otros juegos de arcades.
La acción de Twin Galaxies para borrar las marcas mundiales de Billy Mitchell, sacudió a propios y ajenos durante la semana pasada. Tras estos acontecimientos, el veterano jugador de Donkey Kong y Pac-Man publicó un video respondiendo a dicha polémica.
Dentro del material audiovisual grabado en el evento Midwest Gaming Classic, Billy Mitchell aseguró que reunirá las pruebas necesarias para garantizar su inocencia. Como recordarán los registros en el sitio Twin Galaxies son más que un número, pues representan años de supuestas hazañas, fama y prestigio.
Además la anterior institución americana está vinculada directamente con Guinness World Records, una de las máximas referencias en cuanto a logros humanos se refiere. Como dato adicional, el propio Billy Mitchell apoyó financieramente a Twin Galaxies durante varios años, según lo demuestra este documental creado por el usuario de YouTube Apollo Legend.
De esta manera, el ser vetado de ambos organismos implicaría no sólo perder la confianza de muchísimos fans, también podría significar problemas y demandas legales. En consecuencia no es extraño que el veterano jugador, intente recuperar su credibilidad lo más pronto posible.
Aunque el destituido campeón aclaró que el demostrar su inocencia tomará tiempo, también prometió revelar todos los documentos, entrevistas y evidencias al público.
Si entran al enlace colocado en la fuente, notarán diversas fotografías del ahora llamado “The King of Con” (El Rey del Engaño en inglés) rodeado de otros videojugadores. En una opinión personal, lo anterior en un intento desesperado por conectarse con la comunidad, cueste lo que cueste. Aparte, incluso si Mitchell lograse salir airoso de esta reciente controversia, la relación con sus seguidores se dañará para siempre.
Finalmente los dejamos con la declaración en video del videojugador, la cual se publicó en la Old School Gamer Magazine.
Fuente: Old School Gamer Magazine